El Big Data está cada día más presente en todos los sectores y ya es denominado por muchos expertos de logística como la próxima gran revolución.
Por eso, muchas empresas del sector están ya integrando soluciones que simplifican sus procesos, con el objetivo de almacenar y analizar datos que favorezcan al diseño de estrategias. Son muchos los proyectos que ya explotan el análisis del Big Data y que, poco a poco, forman parte de nuestra vida cotidiana.
Transparencia en la gestión. En el panorama de la logística, el análisis de los riesgos y la toma de decisiones son aspectos necesarios. Por ejemplo, el Big Data puede ayudar a conocer el sentimiento político de un país y la forma de proceder en el caso de que hubiera una huelga o se averiase algún vehículo en dicho territorio.
Análisis de volumen. Para optimizar recursos y minimizar presupuestos es de gran importancia la predicción de volumen de mercancías en un día concreto de la semana, mes y año. Invertir en esta área y determinar patrones que ayuden a predecir picos de volumen es un acierto.
Transparencia para el cliente final. Predecir el momento exacto en el cual el cliente va a recibir la mercancía puede convertirse en una pesadilla para la empresa logística. Factores como el estado del tráfico, del vehículo o del propio conductor son variables que requieren análisis de datos en tiempo real. Si se obtienen, se puede informar con total precisión y transparencia del estado de envío al cliente.
Campañas y analítica web. Teniendo en cuenta los intereses individuales de cada nuevo usuario, se le pueden ofrecer los servicios que serán de su interés de forma automática. Esto es posible analizando el tráfico de la web de cada empresa. De esta manera, el cliente tiene una atención más personalizada.
Como conclusión, nos damos cuenta de que el Big Data hace posible actividades que antes eran impensables y que la información va cobrando protagonismo. ¡No te quedes fuera de este avance!
